Esperanza de vida de un Husky

Esperanza de vida. El promedio de vida de un husky siberiano es de unos 12 años, similar a otros perros medianos y grandes. Muchos viven hasta 15 años y algunos por más tiempo. Las perras tienden a vivir un poco más que los machos en todas las razas y esta no es la excepción. No obstante, esta diferencia no es muy grande, por lo que no te sorprendas si tu mascota masculina sobrevive a una hembra de un amigo o a una hermana.
Salud. A medida que tu Husky siberiano crece puede desarrollar problemas de salud que pueden acortar su vida o hacer que sus últimos años no sean muy cómodos. Debido a que es un perro de trabajo, la actividad restringe las posibilidades de sobre alimentarlo ya que puede provocar la obesidad que puede causarle una muerte prematura. Mantener a tu perro en el peso ideal y activo puede ayudarle a tener una vida larga y saludable. Los trastornos genéticos como la dispepsia de cadera y la atrofia progresiva de retina también pueden causar una disminución de la calidad de vida de tu mascota.
Etapas de la vida. El Husky siberiano generalmente alcanza su tamaño adulto cuando tiene cerca de 12 meses de edad. Se considera un perro adulto cuando tiene entre 1 y 7 años de edad. Una vez que tu mascota llega a la edad de 7 años es considerado un perro mayor. Puede que tengas que cambiarle la dieta a medida que envejece y es posible que notes que no es tan activo como antes. Los cambios en los perros se producen de manera diferente en cada uno, por lo que tendrás que prestar atención a las necesidades específicas de tu mascota para determinar exactamente cuándo tienes que hacer cambios en su estilo de vida.
Consideraciones. Los accidentes son la principal causa de muerte para todos los perros y el Husky siberiano puede tener un mayor riesgo debido a su afición por correr. Si tienes un Husky no premias que pasee sin correa en un espacio abierto. Mantén a tu mascota con una correa o arnés cuando paseen o estén corriendo al aire libre y brindarle muchas oportunidades para que corra libremente en espacios cerrados tales como un gran patio o parque para perros.